Podría escarbar la tierra
y construir con la incisión de mis manos
el cuerpo de una mujer.
Pero el cansancio acabaría derribándome
y durante el sueño
llegaría el desierto como llega siempre,
a tropel e insolente,
para poseer mi obra.
Tendría que volver a empezar.
Aral, gracias por tu visita, eso me ha dado la oportunidad de conocer tu espacio de poemas. He leído los últimos y me quedo junto a ellos. Compartimos afición, así que... nos seguiremos y comentaremos.
ResponderEliminarUn cariñoso abrazo desde 'Poemas del volcán'
Buenas sean este tipo de aficiones. Un juego tan personal.
ResponderEliminarTe saludo.