lunes, 12 de diciembre de 2011

Sería cursi decir

Sería cursi decir
emulando cierta frase al uso:
un poeta muere en mí cada vez que muere
un poeta,
entre otras razones, si bien la principal,
porque es mentira.
Es mentira que nada de lo que vive o muere
ahí afuera
sea una muerte trasladable.
Es mentira que los poetas mueran
puesto que ellos no respiran ni se nutren ni obtienen placer
como poetas sino como átomos compactos
con un cuerpo y una debilidad
(o una fortaleza)
que no entienden de oficios, aunque sí de experiencias.
Es mentira que la muerte de un poeta nos aflija
salvo que le conozcamos de cerca;
hay tantos poetas de los que nada se sabe
como existen artesanos ignotos o sabios recónditos o seres llenos de bondad
o amantes que no alardean y que hacen de su vida
secretamente
un ejercicio oferente y único a una mujer única:
como un don.
Nada muere dentro de nosotros
muera lo que muera en el extenso mundo.
A veces sí nos dan ganas de morir con ellos.
Pero son solo ganas y no aceptamos un acto estéril de cesión
de cuantas capacidades nos han sido adjudicadas.
Nada muere en cada uno sino por una vez
que no se puede contestar y de manera inadvertida:
tal es la fuerza de la sombra que renuncia a ser la nuestra
cuando ya no quiere saber nada de regateos.

12 comentarios:

  1. entre letras, la profundidad, como desasosiego del alma
    saludos

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  2. Así es, amable Omar. El alma desasosegada que escribe para sacar los demonios interiores, para cuestionar, para rabiar.

    Saludos.

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  3. Contrariamente a lo que dices, si se muere, cada vez que alguien muere injustamente,nos mata un poco. Y es que el aire que yo expulso llena otros pulmones,siendo el mismo aire.

    Todo cuerpo es un resumen de átomos compactos, incluso las piedras,aunque se reduzcan a cenizas, seguiran siendo átomos.

    La muerte de un poeta es un acto natural,todo muere, puede afligirnos, pero nos consuela su inmortalidad a través de su obra, si ésta fue buena, porque no todo lo escrito bajo el título de poeta, es poesía.

    A mí,personalmente, me afecta el dolor de los que mueren sin justicia ni recursos humanos, los desheredados de la vida estando vivos, peor que la propia muerte es su dolo, y me afecta.

    Un abrazo

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  4. Morim a poc a poc perquè es renoven les nostres cèl·lules. Deixem ombres i vestits penjats als armaris. Paradoxa: les nostres ombres es tornen grans i els vestits petits.
    Cada poeta deixa les seves pàgines també enrere, al calaix, a l'armari o al prestatge si són editades. Si l'editor vol, el poeta no morirà.

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  5. Genettica. Te entiendo, pero a la vez necesito combatir a veces las metáforas. Por supuesto que el sufrimiento nos conmueve, nos indigna y nos violenta de manera muy profunda incluso. ¿Hacemos algo más? ¿Podemos hacer en ese momento algo más? Tal vez sí, algo, todo, menos morirnos. Y esa conmoción, esa serie de emociones indignadas y virulentas que se producen en nuestra conciencia cuando sabemos de muerte injustas (¿las que se mencionan o las anónimas de las que nadie habla?) nos edifican y nos maduran. Nos invitan a ser más que testigos y el concepto acción deambula en nuestro interior.

    Por eso salvo la obra de los que nos precedieron en la expresión. La de los anónimos que por millones construyeron las grandes obras arquitectónicas o agrarias o de cualquier cariz. Las de los anónimos o no de los que nos han quedado sus palabras. ¿No nos dan ganas de homenajear a tanta literatura de tradición oral o de autores ignotos que nos ha llegado construyendo nuestra sensibilidad y nuestro conocimiento?

    Rubrico tu último párrafo y, créeme, no veo contradicciones entre mis intenciones expresivas en el poema y tu criterio sesudo y sensible. Gracias por hablar así.

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  6. Olga. En morir-nos les ombres solen persistir en els qui queden. No són les físiques, sinó les nostres penes, les nostres influències, i fins i tot i segons casos la nostra llarga mà ... És veritat, la literatura roman. No sé si depèn d'un editor sempre. Les paraules sòn com el vent, sospito. Què importa que nosaltres les pronunciem o no si altres ho faran, perquè el món és un vincle.

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  7. No se muere solo en la física, se muere pausadamente,día a día, por eso la muerte de otros nos mata temporalmente.Y creeme, el sufrimiento mata. Mata la fe y la esperanza y va dejando paso a un sinsentido hacia todo,porque las palabras son una intención inutil cuando no van respaldadas por la acción que expresan.
    Dificilmente son anónimos aquellos que han costruido grandes obras, arquitectónicas o de otro cariz. Toda gran obra siempre va firmada. Son anónimos aquellos que día a día soportan el peso de sus pequeñas obras, esas que nadie ve ni admira, porque pasan desapercibidas.

    " ¿No nos dan ganas de homenajear a tanta literatura de tradición oral o de autores ignotos que nos ha llegado construyendo nuestra sensibilidad y nuestro conocimiento?"

    De este párrafo no entiendo nada, porque la literatura es descriptiva, no oral,a no ser que se lea en voz alta.
    No existe tradición en la literatura, son estilos o tendencias literarias.
    La literatura no nos llega, la elegimos y no contruye nuestra sensibilidad, si acaso la mueve,y amplia nuestro conocimiento.
    Tampoco existen autores ignotos, puede que alguno, muy pocos, toda obra, insisto, tiene la firma de su autor.
    No te preocupes por las contradicciones, dicen que es cosa de sabios tenerlas,la seguridad es algo subjetivo.
    Mi criterio no es sesudo, si acaso debatible,contrarrestar es también de sabios.Dicen.
    Sensiblemente no muero, me muevo, es un defecto útil para sobrevivir y lamentarse de la mala suerte de otros.

    Un abrazo-

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  8. Quise decir narración de transmisión oral. Me excedía con utilizar aquí el término literatura, tal vez.

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  9. Por otra parte, existen gentes que han escrito en silencio y para ellos. Cuyas letras no han salido nunca de un cajón o han terminado en el fuego. Tal vez.

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  10. Cuando hablo de gentes que han construído grandes o pequeñas obras no me refiero a las firmas, me refiero a todo el complejo humano que se ha movido para levantar un templo o una pirámide o una obra pública de envergadura. Y los reivindico, debo hacerlo.

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  11. Por supuesto, la sensibilidad es innata al individuo. Su medida solo la comprobamos a lo largo de la vida y en contacto o colisión con los elementos con los que nos damos de frente. Pero muchas influencias externas pueden ayudar a dinamizarla, a preservarla, a agudizarla. El arte o la literatura estimula la sensibilidad también, yo creo que se establece siempre una relación de causa a efecto (no solo en este tema sino en muchos más) La sensibilidad es evolutiva. ¿Por qué no se va a seguir construyendo a lo largo de nuestro tiempo personal? Ya sé que todo es discutible y matizable.

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  12. Tu escrito es noble, eso ya lo dice todo.

    UN abrazo

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